El próximo invierno las cuestas de barrios como Les Corts o Sarriá no serán un problema para quienes, a pesar de disfrutar de un paseo en bici, se sienten intimidados ante ellas. El Ayuntamiento de Barcelona ofrecerá el uso de 300 bicicletas eléctricas en el marco de un proyecto experimental cuya puesta en marcha costará 5 millones.
Para poder usar estas bicicletas habrá que disponerse del carné del Bicing de Barcelona y pagar una cuota adicional que se cree rondará los 15 euros al año.
Apostar por esta iniciativa dos años antes de que se renueve el concurso para la gestión del Bicing supone un margen suficiente para que la empresa a la que se encomiende la tarea conozca las necesidades y mejoras a acometer con respecto a las bicicletas eléctricas.
Este nuevo servicio se implantará en dos fases y la recogida y entrega de bicis se realizará en puntos diferentes de los habituales del Bicing, salvo en cinco casos, que coincidirán con las plazas más concurridas: plaza Espanya, plaza Sant Miquel, Paseo de Gràcia, plaza Tetuan y Sagrada Família.